El mantenimiento programado de grupos electrógenos es crucial para garantizar su funcionamiento fiable y eficiente en momentos críticos, como el suministro eléctrico de emergencia. Este tipo de mantenimiento permite identificar y solucionar problemas antes de que se conviertan en fallas, lo que minimiza el riesgo de interrupciones inesperadas. Además, al realizar limpiezas y ajustes periódicos, se asegura el rendimiento óptimo del equipo y se prolonga su vida útil. Mantener un historial de mantenimiento también ayuda a cumplir con las normativas y a garantizar la seguridad. En esencia, el mantenimiento programado es una medida preventiva que protege la inversión y asegura la continuidad en el suministro eléctrico.